También, recientemente, he soñado con personas ausentes.
He tratado de pensar en los motivos, pues ninguna de estas personas había cruzado mi mente recientemente.
Y sin embargo ahí están. Por las noches. Recordándome que escribimos historias que ahora son libros con humedad. De esos que nadie compra porque eso, mezclado con el delicioso hábito del cigarro, hace que respirar poco a poco sea más difícil.
Al vendedor también le es difícil respirar pues nadie compra estas historias y se ve forzado a guardar los libros en casa…acumulando humedad.
Yo ya no quiero humedad en mi casa.
Pero nadie compra a mis personas ausentes yo yo sólo quiero sueños con personas presentes…
Quizás sólo debería mudarme.

Leave a comment